Cuatro años he pasado como tesorero de la Filá y algunos otros más antes de serlo ayudando a contar el dinero de las cuotas de fiestas que todos pagabamos a "tocateja" en la reunión del día del Santo Cristo y no podeis imaginar lo mal que se pasa, esperando primero que se aprueben las cuentas, después que todas las cuentas saliesen bien tras pagar todo el mundo y por último por quitarse de encima después de la reunión el montón de dinero que movíamos allí.
Y por fín la cordura y el buen planteamiento de la propuesta de la Junta de la Filá ha hecho que esto quede ya en historia, aunque algo queda aún por pulir ya que las cuentas hay que aprobarlas antes de realizar el pago.
Este año voy a poder disfrutar del momento en el que se apuntan los nuevos miembros de la Filá, que creo que es lo mas bonito de esa reunión, llevo muchos años en los que ni me he enterado rodeado de billetes, sumas, descuadres y nervios.
Se que lo que se ha cambiado era una bonita tradición y yo soy de los que me gustan las tradiciones pero los tiempos cambian y hay cosas que no se pueden hacer igual que hace 50 años. Esta era una de esas.
1 comentario:
jajaja... las chicas el primer día os pueden invitar a un cubatilla, pero el último? Ni hablar! Toda esta pasta había que guardarla en lugar cerrado para no caer en la tentación de gastarla antes de pagar la fiesta! Y ahora... ya la he pagado! Los tiempos cambian...
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